El cepillado, es una técnica de conservación para pavimentos rígidos. Aplicable tanto para suelos de hormigón como asfalto. Consiste en dar un desbaste superficial, que tiene como objetivo eliminar las irregularidades y ondulaciones del pavimento, dando un nuevo acabado superficial. que minimiza o elimina las imperfecciones y escalonamientos. Mejorando la adherencia y rugosidad, y proporcionando mayor suavidad, seguridad y comodidad. Liberándose inmediatamente al tránsito, tras su aplicación.

Estudios internacionales realizados por organizaciones como la IGGA (International Grinding & Grooving Association) de EE. UU. han demostrado que las malas condiciones de una carretera o autopista influyen directamente en el número de accidentes y siniestralidad vial.

El cepillado o también conocido como Diamond Grinding, permite dar un microtexturado sobre el pavimento, capaz de crear un perfil longitudinal suave y uniforme, reduciendo las cargas dinámicas sobre él y las irregularidades (baches).

Al dar solución al escalonamiento y deformaciones, se genera una recuperación del índice de rugosidad-IRI y una mayor adherencia del neumático al pavimento. Alcanzando un mejoramiento en el coeficiente de irregularidad (IRI) de más del 35% (medido con GRIP Tester).
El mantenimiento preventivo junto a un perfil longitudinal sin deformaciones, permite duplicar y hasta triplicar la vida útil de un pavimento de concreto.

El resultado es un pavimento suave, seguro, tres veces más silencioso y agradable para viajar. Esta técnica, con una o dos pasadas de maquinaria, rehabilitará la condición del pavimento con una liberación inmediata. Lo que agiliza el desplazamiento vial.